Hace unos días estuve leyendo sobre los muñecos de pedagogía Waldorf.
Estos muñecos son muy sencillos, hechos con materiales como madera o lana. Apenas tienen detalles lo que hace que la imaginación del niño se dispare.
Hace unos días cree con mi hija unos muñecos inspirados en esta metodología, digo inspirados porque no son como los muñecos Waldorf, pero tienen algo que se les parece, la simplicidad que dispara la imaginación.
Además estos muñecos tienen un plus, y es que han sido creados por ella misma, ella los ha pintado (yo le dibujé la cara y ayudé a marcarle la línea por donde no podía salirse al pintar)
Lleva días jugando con ellos, les ha asignado un rol a cada uno y les ha subido en el garaje de coches donde ella dice que viven todos juntos. También me contó que en la ciudad donde viven hay también un virus y que no pueden salir. Juego simbólico en estado puro.
Estamos creando más e incluso buscando cosas que nos puedan valer de accesorios como una caja de bricks de leche que será su próxima casita.
¿Os animáis a crearlos? Solo se necesitan canutillos del papel higiénico (eso lo tenéis seguro) témperas, pinceles y un bolígrafo para pintarles la cara.
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